SIGNIS (Quito-Ecuador).- El jueves 8 de enero se cumplió la primera reunión de Directorio del año 2009 y con la presencia mayoritaria de los miembros. Esta fue la oportunidad para confraternizar, compartir ideas y socializar algunos proyectos que buscan fortalecer a Nuestra Organización.
Lo más destacado del encuentro fue el compromiso que surgió voluntariamente de cada uno de los Directivos, de arrimar el hombro, de acercarse más, de participar con mayor decisión, de involucrarse directamente en el crecimiento institucional. «Ahora sí puedo, ahora sí tengo más tiempo, este año si» son algunas frases que se escucharon en la reunión y que son estimulantes al oído, al espíritu, al corazón y a la voluntad de construir una Organización cada vez más fuerte, más comprometida con los valores humanos y con una sociedad justa y solidaria. Esperamos que estas palabras y este ánimo contagien a todos los miembros del Directorio, a todos los socios, los colaboradores y a cada uno de los que visitan esta pagina. porque la suma de voluntades es la única forma de construir un mundo de paz, un mundo de equidad y fraternidad.
LA BENDICIÓN DE NUESTRA OFICINA
Una política de puertas abiertas es lo siempre a primado en la Asociación Católica de Comunicación SIGNIS Ecuador y este espíritu se acentúa con más razón en esta nueva etapa porque contamos con mucho espacio en la nueva oficina y todos serán bienvenidos para compartir ideas, sueños y proyectos. para aprovechar este espacio en la Planta Baja del Edificio SIGNIS ALC, buscaremos fortalecer el campo de la capacitación para comunicadores. En este sentido anunciamos la realización de un primer taller sobre producción radial y próximamente estaremos informando los detalles. Por el momento, lo importante es que este espacio físico desde donde irradiaremos toda la actividad de SIGNIS Ecuador, recibió la bendición divida luego de un acto sencillo pero muy significativo que se realizó en el marco de la primera reunión de Directorio del nuevo año. El Padre Jaime Terán uno de nuestros consejeros espirituales, impartió la bendición y esparció el agua bendita para que la protección e iluminación del buen Dios nunca falte en nuestras actividades.
