El episcopado ecuatoriano deploró la crisis entre Ecuador y Colombia tras las incursiones a territorio ecuatoriano, tanto de las FARC, como del ejército colombiano para atacar a un campamento guerrillero de las FARC, que dejó como saldo veinte guerrilleros muertos (entre ellos el subcomandante Raúl Reyes) y tres heridos.
Nuestros obispos hicieron un llamado a «no renunciar a nuestra vocación de pueblo amante de la paz y a construirla desde la justicia y el respeto del derecho», y solicitan que el Gobierno Nacional, las instituciones públicas y privadas, así como cada uno de los ciudadanos «mantengamos la serenidad ante las duras adversidades que nos ha tocado enfrentar en las últimas semanas. Invoca la protección de Dios para que nos ilumine a fin de que trabajemos juntos para superar las situaciones difíciles con inteligencia y decisión.
Aquí la declaración de nuestros obispos.
Ante los últimos acontecimientos que son de dominio público, la Conferencia Episcopal Ecuatoriana
1º) Lamenta profundamente lo ocurrido entre dos naciones hermanas, Ecuador y Colombia, históricamente unidas por múltiples vínculos. Manifiesta su dolor, ante Dios y ante ambos pueblos, más allá de consideraciones políticas, por el nuevo episodio de muertes violentas, cuya sangre clama al cielo. Rechaza la violación de las fronteras ecuatorianas por parte de cuantos han incursionado ilegalmente en nuestro territorio.
2º) Al constatar la pertinacia del recurso a la violencia, que solamente genera más violencia, hacemos un llamado a deponer la agresividad y a emprender un diálogo sincero, camino de reconciliación.
3º) Exhorta a esclarecer los hechos sucedidos en la frontera norte, con transparencia, verdad y justicia.
4º) Invita a todos los ecuatorianos a afirmarnos en la unidad y en la solidaridad, como camino para hacernos fuertes y defender la dignidad nacional, hacia dentro y hacia fuera de nuestras fronteras.
5º) Invita también a no renunciar a nuestra vocación de pueblo amante de la paz y a construirla desde la justicia y el respeto del derecho.
6º) Pide al Gobierno Nacional, a las instituciones públicas y privadas, a cada uno de los ciudadanos que mantengamos la serenidad ante las duras adversidades que nos ha tocado enfrentar en las últimas semanas. Invoca la protección de Dios para que nos ilumine a fin de que trabajemos juntos para superar las situaciones difíciles con inteligencia y decisión.
Presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana